Guía del empresario para afrontar el rechazo
Como empresario, hay que tener mucha confianza. Hace falta confianza para emprender en solitario, montar tu propio negocio o hacerte autónomo, y creer que el éxito es posible.
La confianza es el pan de cada día. Sin embargo, hay momentos que no salen tan bien como nos gustaría, o como habíamos planeado que salieran. A veces, los clientes potenciales o actuales rechazan las propuestas que con tanto esmero hemos presentado.
Las personas, incluso las que amamos, dudan de nuestras capacidades para llevar a cabo un proyecto o desestiman nuestro éxito futuro. Cuando la gente rechaza nuestras capacidades, puede tener un efecto dominó y podemos empezar a rechazar nuestras propias capacidades, nuestro negocio y nuestro futuro.
Lo que haces como empresario es tan fuera de la norma para la persona promedio, que a veces puede ser difícil para otras personas entender lo posible que es trabajar para ti mismo, establecer tus propias horas, y tener un flujo de efectivo positivo mes tras mes.
Aquí tienes algunos consejos para manejar el rechazo de los clientes y de otras personas en tu vida mientras trabajas como empresario.
El rechazo te dice que no es tan malo
Es muy normal temer emociones y sentimientos desagradables como el dolor, la ira, los celos y la tristeza. El rechazo puede hacernos sentir muchos de estos sentimientos desagradables, así que es normal que queramos protegernos y no tener que sentir estos sentimientos negativos.
Sin embargo, cuanto más experimentas el rechazo, más te das cuenta de lo fuerte que eres en realidad. Puedes sentir estos sentimientos, por muy desagradables que sean, y pasarán porque ningún sentimiento dura para siempre.
Puedes seguir adelante con tu negocio, sabiendo que puedes sobrevivir, por mucho que te escueza un rechazo al principio.
El rechazo significa que lo estás petando
Cuando experimentas un rechazo tras otro, puedes deprimirte por ello o puedes dar un paso atrás y pensar en ello. Lo estás haciendo. Estás en la trinchera, y la gente que lo está intentando es la que puede experimentar el rechazo.
La gente que se sienta en el banquillo nunca tiene la oportunidad de intentarlo. Tú no eres una de esas personas. El rechazo forma parte de la experiencia de intentar y alcanzar algo, así que no te rindas todavía.
El rechazo es sólo otra palabra para la oportunidad
Es muy fácil rendirse. Todos nos hemos sentido desanimados a veces, cuando las puertas parecen cerrarse y sientes que no llegas a ninguna parte.
Si vas a convertirte en una estadística, hazlo en positivo. A veces, cuando las cosas no funcionan, hay algo mejor esperando a la vuelta de la esquina. Puede haber un cliente mejor, un contrato mejor o una forma mejor de hacer negocios. Siga adelante y siga buscando oportunidades para mejorar usted y su negocio.
El rechazo es un medio de superación personal
A veces las personalidades chocan, o la gente no comparte la misma visión que tú. A veces, simplemente no te conocen tan bien y les resulta difícil aceptarte por encima de otro autónomo al que podrían conocer mejor. Hay muchas razones ajenas a nuestro control por las que podemos ser rechazados. Sin embargo, también podemos buscar formas de mejorar la experiencia para la próxima vez.
Estudie a su competencia. ¿Hay algo que ellos ofrezcan que usted no? ¿Su sitio web tiene mejor SEO y marketing de contenidos que el tuyo? ¿Hay algún certificado que puedas obtener para demostrar tu competencia en un área clave? ¿Hay algún lugar específico en el que debas reunirte con los clientes, como una conferencia o un evento de networking? ¿Necesitas mejorar tu cartera?
Contrate a un experto o pregunte a un amigo de confianza en el sector cómo puede mejorar su negocio de forma que reduzca la cantidad de rechazos que sufre por parte de los clientes actuales y futuros.
El rechazo te da la oportunidad de demostrar que están equivocados
Hay mucha gente que no duda en decirte lo que estás haciendo mal. Estos autoproclamados «expertos» sacudirán la cabeza con dudas, te dirán por qué las cosas no funcionarán, y la lista continúa. La mayoría de estas personas no tienen tu experiencia ni tus conocimientos. De hecho, la mayoría no tiene autoridad para darte esos comentarios. Cuando sigues adelante y tienes éxito, tienes la oportunidad de demostrar que están equivocados.
Eso marca la diferencia.