Cómo los propietarios de pequeñas empresas pueden evitar el agotamiento
Crear y dirigir su propia empresa es el sueño supremo de muchas personas. Es la oportunidad de controlar por completo tu propia carrera, de dar forma a tu desarrollo profesional y de construir algo de lo que puedas sentirte realmente orgulloso. Puede ser increíblemente gratificante, pero también puede ser enormemente estresante a veces. Cuando diriges tu propio negocio, a veces puedes sentir que no hay nadie que te diga que te tomes un descanso, nadie que te ofrezca orientación y nadie que te ayude a gestionar tu carga de trabajo.
He aquí algunas ideas sobre cómo evitar el agotamiento como propietario de una pequeña empresa y cómo disfrutar de ser su propio jefe.
Desarrollarte
Es una de las cosas que los empleados a tiempo completo dan por sentado (junto con las vacaciones pagadas). La formación y el desarrollo deberían ser una parte central de lo que la mayoría de las empresas establecidas ofrecen a sus propios empleados, pero lamentablemente puede ser una de esas áreas que los que dirigen sus propias empresas pasan por alto.
Con demasiada frecuencia, los propietarios de pequeñas empresas se limitan a tratar de aprender en el trabajo, creyendo que no pueden permitirse el lujo de sacar el tiempo o el dinero de su vida cotidiana. Sin embargo, creo que sí pueden, y deben, por su propio bienestar profesional. Así que reserve un día de formación en algo que le interese y salga de la oficina durante un tiempo para dedicarse a desarrollarse.
Red
Hablando de salir de la oficina, no podemos exagerar la importancia de la creación de redes para quienes dirigimos pequeñas empresas. Más allá de los beneficios obvios de aumentar el número potencial de contactos, también es una forma inestimable de obtener una perspectiva sobre su propio negocio. Si se hace bien, el trabajo en red no debería consistir sólo en vender, sino en desarrollar relaciones mutuamente beneficiosas.
La creación de redes consiste en salir a la calle y conocer a personas que trabajan en su sector, que comparten sus intereses y pasiones y que pueden haber experimentado muchas de las presiones y retos a los que usted se enfrenta ahora. Así pues, la creación de redes no consiste únicamente en conseguir nuevos negocios, sino también en desarrollar y alimentar un grupo de personas que, en última instancia, pueden ayudarse mutuamente de muchas maneras diferentes.
Sepa cuándo necesita hacer crecer su propio equipo
Es uno de los aspectos más complicados de hacer crecer tu propio negocio: ¿en qué momento decides contratar a otra persona para que te ayude? Puede ser una decisión crucial y compleja, pero puede tener enormes implicaciones. Si se hace bien, puede acelerar rápidamente la operación que está llevando a cabo, aportando nuevos negocios y transformando su empresa. Sin embargo, si se hace mal, puede resultar costoso, tanto en términos de tiempo como de dinero, desperdiciado en la formación o en la contratación de la persona equivocada en el momento equivocado.
Entonces, ¿cómo saber cuándo publicar ese anuncio de trabajo en línea? Bueno, para mí y mi equipo, todo se reduce al valor. ¿Dónde se emplea mejor la mayor parte de su tiempo? ¿El acuerdo actual se ajusta a eso? ¿Y qué valor aportaría una nueva persona a tu negocio? Tomar esta decisión en el momento oportuno y contratar a la persona adecuada puede quitarte una gran cantidad de presión y llevar tu negocio al siguiente nivel.
Consigue un mentor (y hazlo tú mismo)
Dirigir tu propio negocio, ya sea como empresario individual o como jefe de un pequeño equipo, puede parecer a veces una lucha solitaria. Ya he mencionado algunas formas de combatirlo, pero también recomendamos encarecidamente otra: la tutoría. Obviamente, tener un mentor experimentado puede ser una verdadera fuente de apoyo, profesional e incluso emocional. Si hablas regularmente con alguien que comparte tu pasión, puedes poner a prueba nuevas ideas o debatir preocupaciones que, de otro modo, se quedarían en el tintero.
Pero ser un mentor también tiene muchos beneficios. Es una oportunidad para transmitir tu experiencia, para sentir que tienes un propósito más allá del reto diario de dirigir tu propia empresa, y puede ser una oportunidad para escuchar una nueva perspectiva sobre una industria de la que puedes estar cansado.
Por último, no puedo dejar de insistir en la importancia de darse un respiro. Ya sea dando un paseo, reservando unos días de vacaciones o simplemente programando un tiempo para quedar con un amigo para comer, es absolutamente crucial que te obligues a encontrar un equilibrio entre el trabajo y la vida. Porque, como tu propio jefe, si no lo haces tú, nadie lo hará.